La ‘Bestia Verde’ de Mercedes AMG
El cupé más radical de Mercedes se llama AMG GT R. Los ingenieros han sacado del laboratorio de Nürburgring un deportivo de raza que destaca por su potente imagen y un gran despliegue tecnológico
Con el motor 4.0 V8 biturbo vitaminado hasta los 585 CV, el Mercedes AMG GT R alcanza los 318 km/h (Mercedes AMG)
Mercedes AMG le ha dado un vuelta de tuerca más a su GT y ha aprovechado el famoso Festival de la Velocidad de Goodwood, celebrado el pasado fin de semana, para presentar su deportivo más radical: el AMG GT R. Tras un intenso trabajo realizado en el circuito de Nürburgring, los ingenieros han logrado ir un paso más allá, sacándose de la manga uno de los deportivos más salvajes del mundo.
Para exprimir al máximo el chasis del Mercedes AMG GT, los ingenieros de la casa han aplicado una doble técnica muy efectiva: reducir el peso y aumentar la potencia. De esta forma, el motor 4.0 V8 biturbo ha recibido una dosis extra de vitaminas (74 CV más que el AMG GT S) que le permite llegar a los 585 CV. La dieta también ha sido efectiva, ya que pesa 90 kilos menos (1.554 kg) gracias en gran parte al nuevo escape y al techo de carbono.
Con una mirada imponente, el nuevo AMG GT R se convierte en uno de los deportivos más salvajes que existen actualmente (Mercedes AMG)
¿El resultado? Esta bestia bañada con color “verde infierno” es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 3,6 segundos y alcanzar un pico de 318 km/h. El motor va asociado a la misma caja de cambios del AMG GT, de doble embrague y 7 marchas, pero se han aligerado algunos de los componentes y se han ajustado los desarrollos.
Las mejoras aerodinámicas realizadas en el GT R son profundas. Destaca el frontal, que es prácticamente calcado al AMG GT GT3 (un modelo de competición), y que destaca por unas entradas de aire sobredimensionadas que escondes elementos móviles para jugar con el flujo de aire y el agarre delantero. La zaga está presidida por el enorme alerón, que se puede ajustar manualmente, y por el agresivo paragolpes que integra un doble difusor muy llamativo. En su interior, el AMG GT R refleja un espíritu racing se mire por donde se mire: baquets de competición, costuras vistas, inserciones en fibra de carbono, cinturones de color amarillo…
En la zaga, el alerón de grandes dimensiones se puede ajustar manualmente (Mercedes AMG)
Esta bestia bañada con color “verde infierno” es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 3,6 segundos y alcanzar un pico de 318 km/h
Pero no todos los secretos de la nueva Bestia Verde están a la vista. El eje trasero direccional (puede cambiar el ángulo de las ruedas hasta 1,5 grados), junto con el diferencial trasero y la vía posterior ensanchada, son aspectos claves para mejorar su rendimiento dinámico sobre el asfalto. Además, las suspensiones han sido desarrolladas específicamente pensando en su uso en circuito. Como en el AMG GT, está dotado de tres programas de conducción (Confort, Sport y Sport Plus).
Baquets de competición, costuras en amarillo, inserciones en fibra de carbono, volante deportivo... (Mercedes AMG)
Los neumáticos escogidos para la ocasión son unos Michelin Pilot Sport 2, montados sobre unas llantas de 19 pulgadas en el eje delantero y de 20 pulgadas en el trasero. Los discos de freno de grandes dimensiones (390 mm delante y 360 mm detrás) pueden ser sustituidos opcionalmente por unos frenos cerámicos con discos de 402 mm delante y 360 mm detrás, que permiten un ahorro extra de peso de 17 kg.
Fuente: http://ow.ly/VDjO30oZ7yZ